Reclamos a destiempo

Extraño y absurdo,

es que preguntes porque dejé de quererte.

-¡Que ironía!-

-Pensé que ya lo sabias-



¿Acaso no has probado mis lágrimas?

¿Acaso no pinté tu puerta de azul y dibujé

Un ángel en tu espalda para que te cuidara?



¿Acaso no cociné sueños y batí malteadas de orgasmos,

Tendí mi cama, quité el maquillaje y me reconcilié con el sexo?



¿Acaso no me puse tacón para bailar contigo un tango,

Ah,

Y algo más?



Resarcí mi error tejiendo con hilo blindado

Las heridas de tu corazón

Para que nadie más nunca te hiciera daño

Pero, para ti nada nunca valió nuestra historia.



Ya no pienso añadirle un pedazo a la minifalda que nunca me viste,

Ni voy a sembrar los cadáveres de las rosas que me diste;

Claramente, no pienso releer las cartas que ni siquiera escribiste

Ni comerme los dulces que están en el cajón



Se secó el estanque de las ranas y de los sapos,

Se rompió la tiza con la que repasaba tu alma

Se pudrió la sandía que dejamos en el comedor

Y se leyeron los libros que no pude leer a tu lado…



Ilusorio es el mundo del amante;

Que soñando vive,

Y soñando se encuentra con el que nunca fue,

Y con el amor que nunca será 

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• Segmento IV