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A Clara Elena

Publicado el , 29 de Dic de 2013
Se llama clara, su nombre, una paradoja; Clara solo su piel y su roce.
Oscura mirada, oscura vida, oscura habitación que la ve lamentarse noche y día.
La calle la ve sonreír, le ve amistosa y en segundos solitaria, yo la veo, como otros no pueden, y amaría verla como esas cuatro paredes le ven, acariciar su dolor y su efímera alegría.
Una pared nos separa, la misma pared que le ve llorar, me ve reír.
Clara, misterio femenino que intento descubrir, y cuando creo que lo tengo ¡suaz! se convierte en otra, y desespero, y , y sonrió , y me digo - ¡Vaya mujer! la has perdido otra vez. 

Clara, aclaro mis pensamientos: Me gusta el ser indescifrable, el que me hace descubrirle poco a poco, el ser que después se reinventa.

Clara melancolía, clara hermosa sonrisa, clara perfectos rizos, clara, me has dejado colgada, ya tu pared no es mi pared, ya no hay días para verte esconder la melancolía en los tantos peluches o en tomaza aquella pequeña bolsita donde guardabas hierba que olía a tristeza...Otros intentaran descifrarte, yo hoy solo puedo evocarte.
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Sobre el autor

Bakuru Camocara



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No es un recetario.

Me gustan las mujeres con ojos rojos, y versos locos. Con neuronas que mueren al inhalar y neuronas que nacen al analizar. Las mujeres con cerebro inquieto y labios quietos, con dedos extraños, sonrisas demenciales, que puedan vivir aquí y en marte. Las mujeres que miran y observan, la ...

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