Dama
Publicado el , 20 de Dic de 2018
Esa dama de ojos cafés controla mi demencia,
tan loca que he estado a punto de soñarla,
pero es por esa locura mía que no puedo dejar de pensarla,
ella me cautiva con tan solo sonreír.
Son cafés sus ojos pero aun así he podido ver el azul del cielo y en el mar el reflejo de sus besos, su sonrisa.
Su sonrisa enciende llamas en mi corazón,
dígame usted como no admirar esos labios tan perfectos si cada vez que me habla me cautiva más.
No hay doncella más dulce que ella, no hay otras manos que yo quiera tocar, ella es un sueño, ella es un anhelo, ella la vida.
Su figura no tiene defectos,
Ella posee un aroma inolvidable, es algo mejor que oler un ramo de margaritas,
su cuerpo da paz, me mayor plenitud que un manantial, yo la admiro,
La admiro por ser ella, la admiro porque me gusta, la admiro eternamente.
Adoro escucharla, su voz penetra hasta el último rinconcito de mi corazón,
la admiro tanto, la admiro con todo lo que yo pudiera darle, la pienso,
a Dios doy gracias por permitirme conocerle, ella es la vida,
no hay otro ser al que yo admire como lo hago con ella, YO la pienso.
La he visto un par de veces, pero no me canso,
no me canso de ver el diseño de su nariz tan perfecta,
me encanta verla para hacerle sonreír mientras me habla,
es tan hermosa y ella lo sabe, ella sabe que cuando sonríe mi admiración por ella aumenta.
Hay algo en particular en ella que me seduce; su inteligencia,
no me canso de escucharla, pues cada palabra que dice la hace especial,
adoro sus manos, sus ojos, su cuerpo, sin dejar pasar esos deliciosos momentos a su lado que tanto me encantan,
sí! Esas tardes frías me encantan, ¿podría haber un momento más perfecto?
Mi dulce dama que rico es volver a ver la sonrisa en tu rosto,
que rico es volver a verle el corazón latente por la felicidad,
que delicioso es saber que sonríes por mí,
que maravilloso es saber que nos gustamos y que esos recuerdos suyos serán para siempre.
tan loca que he estado a punto de soñarla,
pero es por esa locura mía que no puedo dejar de pensarla,
ella me cautiva con tan solo sonreír.
Son cafés sus ojos pero aun así he podido ver el azul del cielo y en el mar el reflejo de sus besos, su sonrisa.
Su sonrisa enciende llamas en mi corazón,
dígame usted como no admirar esos labios tan perfectos si cada vez que me habla me cautiva más.
No hay doncella más dulce que ella, no hay otras manos que yo quiera tocar, ella es un sueño, ella es un anhelo, ella la vida.
Su figura no tiene defectos,
Ella posee un aroma inolvidable, es algo mejor que oler un ramo de margaritas,
su cuerpo da paz, me mayor plenitud que un manantial, yo la admiro,
La admiro por ser ella, la admiro porque me gusta, la admiro eternamente.
Adoro escucharla, su voz penetra hasta el último rinconcito de mi corazón,
la admiro tanto, la admiro con todo lo que yo pudiera darle, la pienso,
a Dios doy gracias por permitirme conocerle, ella es la vida,
no hay otro ser al que yo admire como lo hago con ella, YO la pienso.
La he visto un par de veces, pero no me canso,
no me canso de ver el diseño de su nariz tan perfecta,
me encanta verla para hacerle sonreír mientras me habla,
es tan hermosa y ella lo sabe, ella sabe que cuando sonríe mi admiración por ella aumenta.
Hay algo en particular en ella que me seduce; su inteligencia,
no me canso de escucharla, pues cada palabra que dice la hace especial,
adoro sus manos, sus ojos, su cuerpo, sin dejar pasar esos deliciosos momentos a su lado que tanto me encantan,
sí! Esas tardes frías me encantan, ¿podría haber un momento más perfecto?
Mi dulce dama que rico es volver a ver la sonrisa en tu rosto,
que rico es volver a verle el corazón latente por la felicidad,
que delicioso es saber que sonríes por mí,
que maravilloso es saber que nos gustamos y que esos recuerdos suyos serán para siempre.
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