Remembranzas

Con muchas esperas me desperté, 
como si de nuevo tu voz se adosara.
Apenas se asomaba el sol, 
una noche no era suficiente, 
dos  noches coincidencia.

Toda la vida una certidumbre,
 en ese sueño me abrazabas, 
me soltabas, me herías.

Estamos tan solos,
 tan llenos de incertidumbres,
 tan calmos como el río sin corriente.

Si solo la tormenta retornase, 
que haríamos, volveríamos a nadar en contrariedades.

Nos perderíamos en tiempos solemnes, 
donde fuimos lo que no somos,
 donde yo me quedé.

Llena de reminiscencias sin el alivio de tu existencia.

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