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Publicado el , 15 de Ene de 2022

Cada vez que cierro los ojos
te cruzas en mi pensamiento,
un suspiro y una sonrisa acompañan
el palpitar de este corazón.

Una melodiosa brisa acaricia este momento,
en dónde te conozco y se entrelaza
tu voz con mis suspiros,
te veo en mis sueños y te encuentro en mis letras...

Son tus palabras las que quiero escuchar,
tus ojos los que tanto anhelo ver,
tus manos las que quisiera acariciar
y tú boca en la que me quiero perder!

En esta vida y en esta noche
te prometo que haré de ese momento
un recuerdo memorable, el cual atesoraré en mis memorias y el cual recordarás con una sonrisa.

Conocerte ha sido perderme en un mundo desconocido, embarcarme en un viaje sin retorno, pensarte cuando todo está en silencio, extrañarte cuando no te hablo.

Saber que existes me hace feliz, porque en algún momento sé que mi alma te encuentra y en ese preciso instante me robas el aliento, me inspiras a escribirte y te anhelo con locura insensata!

Me recuesto en mi cama y te imagino junto a mi, quizás como un ideal perpetuo de un momento puro, sincero y honesto.

Te abrazo, te siento, te encuentro y en ese preciso instante sé que mis palabras llegan a ti... Como un beso, una caricia y una sonrisa.

Y suena esa canción que solo tú puedes oír, donde quiera que estés y a dónde quiera que vayas: iré contigo...


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Sobre el autor

Yarilennys Bastos Meza



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Etéreo

Como un enfermo terminal que analiza y contempla en silencio su agonía, así me siento hoy al ver mi vida después de setenta años… Me perdí en el sabor de las fresas silvestres, que evocan mi perenne infancia. Me siento impotente al recordar los ojos de ...

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